septiembre 23, 2013

ANDRÉS CARNE DE RES

Me salto el orden cronológico de los acontecimientos porque Andrés es otro rollo y no puede esperar.
Ya tenía ganas de conocer el restaurante más famoso de Bogotá. Todo el mundo habla de Andrés, pero creedme que ni lo que te cuenten ni las fotos hacen justicia a este restaurante-discoteca, por definirlo de algún modo, situado en un edificio de cinco plantas donde todo esta pensado para que disfrutes.


Nada mas llegar te preguntan si quieres guardar el abrigo y al instante aparece un chico encantador con un enorme saco rojo en el que guarda tu chaqueta. Delante de ti lo cierra con un candado y te da la llave con un colgante que me hubiese llevado de no ser porque tenía que abandonar mi abrigo. Una idea que me encantó y que deja que sigas disfrutando de la noche sin esperar largas colas.

La decoración diferente y divertida. Todo esta lleno de cosas...
y no hablemos de la comida. Todo buenísimo e infinitas posibilidades para elegir en una carta de 64 páginas.
Arepas, ceviches, carnes... y todo ello lo puedes acompañar con cócteles y por supuesto con guaro antioqueño.


Bogotá sorprende y este sitio es un ejemplo.
Nunca estuve en un lugar así tan grande y divertido.
La gente abandona su cena y se tira a la pista como loca cuando suena su canción favorita, bueno la gente...y nosotros también!!
Todos a rumbear como dicen acá.


No hay prisa para nada y nadie te apura porque llega el siguiente turno.
Disfrutas de tu cena, del baile y de la compañía. Qué bien lo pasamos!!...y cuánto se echa de menos a la familia y amigos en lugares así!!
Veníd todos a vernos!!


Sólo por Andrés merece la pena cruzar el charco!!


Besos para todos desde aquí y la mejor banda sonora de este viaje para ambientar el post :)








septiembre 13, 2013

EMPEZAMOS...


Después de unas 10 horas de vuelo y un pollo en salsa de densidad desconocida para mi hasta el momento(que alguien me explique el tema de la comida en los aviones por favor), llego a Colombia.
A través de la ventanilla del avión veo un paisaje que me recuerda a Asturias pero aterrizo en Bogotá, una ciudad sin mar y sin sidra...Cuantas cosas vamos a echar de menos!!
Bogotá es verde, muuuuy verde.
Los cerros nos rodean y casi puedes verlos desde cualquier zona de la ciudad.
Son enormes y salvajes y me recuerdan todo el tiempo que estoy en un país muy diferente.
El tráfico es horrible, aquí hay trancón (atasco) en todas las calles, van a lo loco, nadie deja que cambies de carril, hay que lanzarse decidido.Madrid es pan comido al volante...
La verdad es que en mis primeras horas estoy desubicada, la ciudad es enorme y pasas de zonas preciosas a otras que hacen pensar que queda demasiado tiempo para la fecha de vuelta, pero no vamos a tirar la toalla tan pronto.
Descanso unas horas en una casa de revista, la miro y pienso "bueno, esto si que es mejor seguro!!"
La altitud se nota y mucho la primera noche me despierto cada dos por tres con la sensación de que me falta el aire pero sobrevivo :) y pasadas unas horas ya debo tener glóbulos rojos para exportar porque ya ni me entero, puede que los chupitos de guaro (aguardiente) muy típicos aquí hayan ayudado.
Esto acaba de empezar...
Besos para todos, por aquí estamos bien ;)










BYE BYE

Hace unos días partí rumbo a Bogotá desde Madrid.
Pensaba escribir desde allí el primer post de este blog que me mantendrá en contacto con mi familia y con todo aquel que quiera saber como se vive en esta ciudad, pero como casi todas las cosas que se planean nada salió como esperaba, los últimos días fueron de despedida continua y cañas hasta el último minuto y Bogotá me pilló con el trabajo sin hacer.
Con esto del cambio horario me vais a permitir esta “correspondencia común”, es la mejor manera que he encontrado de mantener a todo el mundo al día.
Los planes cambiaron y lo hicieron del todo. Jamás pensé que Bogotá sería el destino, pero lo cierto es que puede ser tan bueno o tan malo como cualquier otro, como casi siempre es sólo cuestión de actitud, era momento de tomar decisiones y allá voy!!
Despidiéndome de una amiga dije “No se muy bien que voy a hacer allí” y ella contestó “Magia”. Ojalá tenga razón, ojalá este viaje traiga ilusión y un montón de cosas buenas.
Ya se que han cambiado mucho las cosas, que ahora en unas horas puedes estar de nuevo en casa y que podemos hablar incluso cada día, ya me lo habéis dicho todos!! Pero caray!! es que parece que ya no puede una ni despedirse en condiciones…
Que siiii, que pasará el tiempo volando… ya lo seeeee, pero también me apetece decir que os echare mucho de menos, o a ver si resulta que regalan por ahí billetes y yo no me he enterado.
Me llevo todos los abrazos en la maleta para cuando me entre la morriña y preparad un buen jamón porque si tenéis razón y es verdad que el tiempo pasa volando no quiero que os pille la vuelta con la compra sin hacer ;)
Millones de besos para todos, mucho amor y alegría!
En unas horas mis primeras impresiones de Colombia.